Marruecos, un nuevo actor potencial en la producción de hidrógeno
Marruecos continúa en la búsqueda de proyectos comprometidos con el medio ambiente y el cambio climático. Desde hace tiempo, sus proyectos solares y eólicos han dotado al Reino de gran relevancia en la lucha contra el efecto invernadero. Debido al declive del comercio de petróleo, las energías renovables se han convertido en las alternativas en las que más se está invirtiendo.
Uno de los elementos que más esta siendo explotado por el país alauí es el hidrógeno. El Reino es uno de los países mejor colocados para la producción de hidrógeno verde y limpio, sólo por detrás de Estados Unidos, Chile, Arabia Saudí y Australia. El desarrollo de este sector ha conllevado a que la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) califique a la nación como una de las que más invierten en este recurso. Incluso indican en sus informes que la importancia de Marruecos respecto al hidrógeno va a significar que el propio país sea capaz de influir en los precios y venta de esta energía.
Este producto se está empezando a utilizar, en el intento de descarbonizar la industria y, así, reducir las emisiones de gases de crean el efecto invernadero. Colabora con esto el deterioro de la situación ecológica y la incipiente emergencia climática de la que los expertos están avisando con tiempo para poder disfrutar de un buen y seguro futuro.
Por su parte, Marruecos ha sabido hacerse hueco desde hace ya años en este sector y en poco tiempo se ha transformado en uno de los países que más facilidad tienen para producir hidrógeno verde a bajo coste. La capitalización de este sector, junto al solar y al eólico, debería crear un estatus de importador para el Reino.
Asimismo, el informe que publica IRENA y en donde se recogen estas buenas noticias, estima que, para 2050, el uso del hidrógeno podría alcanzar hasta el 12% del consumo mundial de energía. Por otro lado, recuerda que la importancia de este sector ayudaría a mejorar las economías mundiales y la situación de desempleo de muchos ciudadanos. El desarrollo del hidrógeno verde supondría la creación de más de 15.000 puestos de trabajo.
“Los países que logren convertirse en grandes exportadores de hidrógeno verde y combustibles derivados también deberían ganar importancia geoestratégica”, concluye el informe.
El hidrógeno verde es uno de los recursos que más está atrayendo a inversores y a empresas de todo el mundo para producir. Su utilización está comenzando a ser masiva y no está pasando desapercibido por países como Marruecos, que están llevando el alza de la revolución energética. Este hidrógeno se produce a partir de electricidad renovable, ya venga de la obtenida por la energía eólica o la solar, y después se crea a través de un proceso de electrólisis, que descompone el agua en dioxígeno y gas hidrógeno. Lo bueno de este es que es un recurso interminable, en comparación con su versión normal que se obtiene de los productos fósiles y que tiene fecha de caducidad.
Marruecos se convierte así en un país pionero en política climática y energética a nivel mundial, pero donde más destaca es en el continente africano. Desde hace años, las políticas para reducir el CO2 y otras iniciativas está instaurando un gran auge de ecologismo en la nación. El Reino lleva décadas cerrando sus años con aumento del uso de las energías renovables. En 2020, el 40% de la energía utilizada procedía de estas energías.
Los principales planes del Reino señalan que la situación cada vez va a ir en aumento y en el último informe presentado a la ONU -Organización de las Naciones Unidas- pretender conseguir una cuota del 70% de este recurso para el año 2040 y para 2050 se espera recaudar la cifra del 80%.
El reino alauí es uno de los lugares del mundo que mejor clima tienen para la producción de grandes cantidades de energías renovables. Sobre todo, este es el caso de la energía solar ya que tanto en verano como en invierno Marruecos cuenta con largas horas de sol durante el día. Su condición está siendo explotada por distintos países, incluso por algunos de Europa, que otorgan al reino un gran potencial para un futuro verde y sostenible.
