El Parlamento del país está investigando la supuesta donación de una isla por parte de su expresidente al ex emir de Qatar Hamad bin Khalifa Al-Thani

Mauritania, víctima de la corrupción y del crimen organizado

photo_camera REUTERS/LUDOVIC MARIN - El ex presidente de Mauritania, Mohamed Ould Abdel Aziz

El ex presidente de Mauritania Mohamed Ould Abdel Aziz ha sido interrogado este lunes en respuesta a las investigaciones que le acusan de “apropiación indebida de bienes públicos" y de dilapidar una isla para el ex emir de Qatar. El exmandatario mauritano es objeto de “fuertes presunciones de mal gobierno y malversación de bienes públicos”, ha informado la agencia de noticias AFP.  El equipo de defensa jurídica de Abdel Aziz confirmó la detención a través de una rueda de prensa

El Parlamento de este país también está investigando la supuesta donación de una isla por parte de su expresidente al ex emir de Qatar Hamad bin Khalifa Al-Thani, según informó el diario Asharq Al-Awsat hace un mes. Esta investigación forma parte de otra más amplia en la que Mohamed Ould Abdel Aziz es acusado de varios cargos de corrupción. Según estos documentos, el exmandatario cedió una isla ubicada en una cuenca costera en el Océano Atlántico conocida por ser hogar de millones de aves migratorias, de acuerdo con la información a la que ha tenido acceso el periódico Arab News. 

El jeque Hamad bin Khalifa al-Thani

El Parlamento de Mauritania reveló esta investigación al mismo tiempo que preparaba una serie de enmiendas que permitieran al Tribunal Superior de Justicia enjuiciar a funcionarios de alto rango. En medio de esta espiral de incertidumbre, varios medios de comunicación del país filtraron documentos que mostraban una serie de conversaciones entre la embajada de Qatar en Nouakchott y el Ministerio de Asuntos Exteriores de Qatar y en las que supuestamente se hablaba de “una hermosa isla” en Mauritania. 

El último expediente abierto por el comité antes de presentar su informe final se refería a la concesión por parte del expresidente del país de una isla al ex emir de Qatar. El digital Asharq Al Awsat ha señalado que, en abril de 2012, Ould Abdel Aziz nombró a un asesor presidencial, el abogado Ibrahim Ould Daddah, quien recibió instrucciones de dar seguimiento a los distintos procedimientos puestos en marcha para entregar esta isla a los qataríes. A pesar del avanzado estado de las conversaciones entre ambas partes, estas se detuvieron cuando el expresidente recibió un disparo en octubre de 2012. Aun así, algunos miembros del Parlamento consideran que esta decisión, aunque no se llegara a producir, constituye una clara violación de la constitución. 

Las relaciones entre ambos países se fueron deteriorando con el tiempo. El Gobierno de Mauritania anunció en junio de 2017, cinco años más tarde, la ruptura de relaciones diplomáticas con Qatar, acusando a Doha de “apoyar organizaciones terroristas y propagar ideas extremistas”. La agencia estatal mauritana de noticias, AMI, publicó un comunicado en el cual las autoridades del país aseguraban que, en los últimos años, Qatar había “trabajado para difundir la anarquía y las tensiones en muchos países árabes, lo que ha causado grandes desastres en estos países, en Europa y en el mundo”. Ese mismo mes, Arabia Saudí, Egipto, Bahréin, Emiratos Árabes Unidos, Yemen y Libia hicieron público que cortaban las relaciones con la pequeña península del golfo Pérsico, acusándola también de “apoyar grupos terroristas”, algo que Doha ha negado rotundamente en repetidas ocasiones. 

Un mes después de que el informe elaborado por el Parlamento fuera revelado, la Policía ha acudido a la casa del expresidente para interrogarle. La agencia de noticias AFP ha señalado que, por el momento, no se sabe a qué hora finalizó la audiencia de Mohamed Ould Abdel Aziz, que tuvo lugar en la sede de la Dirección General de Seguridad Nacional (DGSN) del país. 

Mohamed Ould Abdel Aziz asumió el poder del país mediante un golpe de Estado en 2008 y fue elegido presidente al año siguiente. En 2014 volvió a ganar las elecciones con casi el 82% de los votos. La mayoría de los partidos de la oposición intentaron boicotear estos comicios y otros parlamentarios celebrados en 2013, alegando que el proceso tenía diversas fallas. Aziz ha sido un claro aliado en la lucha contra algunos grupos extremistas en la región del Sahara. 

El expresidente ignoró una citación del comité parlamentario el pasado mes de julio, coincidiendo con la aprobación por parte de los diputados de una ley por la que se establece un Tribunal Superior de Justicia, con jurisdicción para juzgar al jefe de Estado y a los ministros en casos de “alta traición”, de acuerdo con la prensa local. 

El presidente de Mauritania, Mohamed Ould Cheikh El Ghazouani, en la cumbre del G5 en el Sahel, en Nuakchot (Mauritania), el 30 de junio de 2020

El actual presidente, Mohamed Ould Cheikh El Ghazouani, que le sucedió en agosto de 2019, era su jefe de gabinete y ministro de Defensa. Sin embargo, su política ha optado por dejar de lado a Aziz. Y no solo eso, sino que, durante su Gobierno, una comisión parlamentaria, encargada el pasado mes de enero para arrojar luz sobre varias incógnitas sin resolver durante sus años al frente del Estado, ha enviado un informe a la justicia mauritana para que el exmandatario sea investigado.

Entre los casos investigados por esta comisión – afirma AFP—se encuentran la gestión de los ingresos del petróleo, la venta de propiedades estatales en Nuakchot, la liquidación de una empresa estatal que suministraba alimentos y las actividades de una empresa pesquera china, Pully Hong Dong. El nuevo jefe de Estado ha llevado a cabo en las últimas semanas una reorganización del Gabinete, despidiendo a varios ministros para “darles el tiempo que necesitan para probar su inocencia”, tal y como señaló el secretario general de la presidencia, Adama Bocar Soko. 
 

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