México, quinto país con más armas de fuego sin registrar en el mundo
Durante el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), con motivo de la conmemoración del Día Interamericano para Contrarrestar la Fabricación y el Tráfico Ilícitos de Armas de Fuego, Alejandro Celorio, consultor jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, aseguró que su nación es el "quinto país del mundo con más armas de fuego sin registrar”.
Esta afirmación pública coincide con los diferentes datos que hay acerca de la posesión ilegal de armas en México, Small Arms Survey calcula que "hay más de 13 millones de armas sin registro en circulación en nuestro país a pesar de que las leyes mexicanas de posesión de armas son estrictas y solo existe una oficina administrada por el Ministerio de Defensa (...) para que los civiles puedan solicitar permiso y comprar armas de fuego", argumentó Alejandro Celorio Alcántara, durante su intervención.
Según cifras oficiales del Gobierno de Andrés López Obrador entre el 70 y 90% de las armas incautadas en México tienen su origen en Estados Unidos, y se estima que "cada año se trafica más de medio millón de armas de fuego desde los Estados Unidos hacia nuestro país", alegó Celorio.
De acuerdo con las investigaciones, el armamento suele estar diseñado para uso militar, lo cual confiere a los grupos criminales mexicanos un poder de fuego importante, que acaba traduciéndose en "masacres que dejan decenas de muertos en un par de minutos”, señaló el representante mexicano en señal de preocupación.
Como medida preventiva, Alejandro Celorio afirmó, durante su comparecencia en la OEA, que "los gobiernos tienen la oportunidad de animar al sector privado para que, con la debida diligencia, el debido cuidado, prevengan que sus productos causen un daño y en el caso de armas, y más de las armas de diseño para uso militar, caigan en manos de criminales".
México está trabajando en coordinación con Estados Unidos para combatir y prevenir el tráfico ilegal de armamento. Los esfuerzos fronterizos y en aduanas están teniendo éxito como parte del plan de contención de la delincuencia, sin embargo, las empresas fabricantes y distribuidoras siguen siendo un componente pendiente en la gestión de este conflicto.
En agosto de 2021, el Gobierno mexicano interpuso una demanda civil contra estas empresas estadounidenses, ya que consideran que "sus actividades negligentes e ilícitas facilitan el tráfico de su producto generando esta espiral de violencia", sentenció Celorio.
Por su parte, el representante de Estados Unidos ante la OEA, Bradley Freden, se mostró de lado del Ejecutivo mexicano y afirmó que su país "reconoce su responsabilidad para cumplir con su parte en prevenir la exportación ilegal de armas de fuego a nuestros vecinos, y se compromete a trabajar con México, el Caribe, América Central y otros países de la región para detener el movimiento ilegal de armas de fuego a través de las fronteras".
Durante su comparecencia, Alejandro Celorio sostuvo que el tráfico ilícito de armas no es un problema que sólo incumba a México, sino que muchos otros países de la región de la OEA también se enfrentan a esta situación.
Esta crisis de armas tiene un coste social alto para los países que lo sufren, Gastón Schulmeister, director del Departamento de Contra la Delincuencia Organizada de la OEA, señalo que "el tráfico ilícito de armas de fuego está directamente asociado con el accionar de las organizaciones criminales trasnacionales y vinculado a otros mercados ilícitos tales como el narcotráfico, la minería ilegal, la trata de personas, entre otros".
Coordinador de América: José Antonio Sierra.
