Suspensión de la CEDEAO a Burkina Faso
La Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) ha suspendido este viernes de sus funciones a Burkina Faso, tras el golpe de Estado perpetrado por el Ejército del pasado lunes, en una cumbre virtual extraordinaria a la que asistieron los jefes de Estado y de Gobierno para analizar la situación.
Asimismo, la cumbre se convocó de manera urgente por Nana Akufo-Addo, presidente de Ghana y líder de la CEDEAO.
No obstante, los asistentes de la cumbre no tomarán ninguna otra medida adicional dirigidas hacia el país, aparte del envío de una misión civil y militar de la CEDEAO a la capital, Uagadugú, con el objetivo de estudiar la situación política dentro del territorio.
La CEDEAO "enviará este sábado una misión de jefes de Estado Mayor militar de los distintos países a Uagadugú", para "evaluar la situación, sensibilizar a las nuevas autoridades sobre la necesidad de que se mantengan en una postura republicana y llamar su atención sobre las consecuencias negativas de su golpe de Estado en el país", comunicó la Presidencia de Costa de Marfil, cuyo representante, Alassane Ouattara, asistió a la cumbre.
Además, los dirigentes participantes han decidido acordar una nueva reunión en Acra, capital de Ghana, donde volverán a discutir la evolución de los acontecimientos, según el portal de noticias Burkina24.
De acuerdo con la información confirmada a EFE por fuentes de la CEDEAO, los dirigentes “han suspendido a Burkina Faso tras el golpe”, sin decidir, por el momento, la imposición de sanciones, además de exigir “la liberación del presidente Roch Marc Christian Kaboré”, quien fue derrocado y presuntamente detenido por los golpistas.
Asimismo, el líder de la CEDEAO ha señalado la necesidad de que la situación en el país africano se solucione por medio de la paz, así como defender el valor de “una democracia pacífica, justa y estable” tras el golpe de Estado, pidiendo una “postura firme” en contra del derrocamiento de los Gobiernos democráticos, según informa Joy News.
"Os pido examinar críticamente este fenómeno en alza en nuestra región para que podamos tomar las decisiones necesarias que cumplan las aspiraciones y expectativas de la ciudadanía. El resto del mundo nos observa para que seamos firmes en este asunto", agregó Akufo-Addo.
Recordó, también, el protocolo de la CEDEAO sobre Democracia y Buena Gobernanza, el cual prohíbe los cambios inconstitucionales en lo que respecta a sus Estados miembros, dejando como única opción el acceso al poder por medio de elecciones libres y transparentes.
Además, en el discurso de apertura de la cumbre, Nana Akufo-Addo ha advertido a los asistentes que la democracia en la región está sufriendo “un retroceso” tras los anteriores golpes de Estado en Mali, en Guinea-Conakri y en el propio Burkina Faso.
"El deterioro de la situación política en nuestra región debería ser un asunto de gran preocupación para todos nosotros. Ningún país actual está aislado de su ocurrencia en la comunidad. Y tenemos que actuar para cortarla de raíz", aseguró el presidente de Ghana.
El golpe de Estado se produjo por parte de los militares con el objetivo de protestar por la inseguridad y las pocas acciones para hacer frente al yihadismo, exigiendo la dimisión de Kaboré y más altos funcionarios de las fuerzas de seguridad.
El líder de los golpistas, el teniente coronel Paul Henri Sandaogo Damiba, pidió en su primer discurso el apoyo de la comunidad internacional a Burkina Faso “para que pueda salir de esta crisis lo antes posible y reanudar su camino hacia el desarrollo”.
"Comprendo las legítimas dudas que suscita esta ruptura en el funcionamiento normal del Estado, pero quiero asegurar a todos los amigos de Burkina Faso de que el país seguirá respetando sus compromisos internacionales, especialmente en lo que se refiere al respeto de los derechos humanos", añadió Damiba.
Además, el líder del Movimiento Patriótico por la Salvaguardia y la Restauración (MPSR), nombre de la actual junta militar dirigente del país, aseguró que la “normalidad constitucional” sólo volverá si se aceptan las condiciones que exige el pueblo burkinés.
Los militares tomaron el poder en Burkina Faso tras un golpe de Estado perpetrado el pasado día 24, el cual se confirmó después de la aparición de miembros de la junta militar en la televisión estatal RTB, donde anunciaron haber depuesto al presidente Roch Marc Christian Kaboré, la disolución del Gobierno y del Parlamento, así como la suspensión de la Constitución.
