Ucrania vuelve a exportar sus cereales
Fin del bloqueo a la exportación de cereales de origen ucraniano. Un barco cargado con 26.000 toneladas de maíz ucraniano ha zarpado desde el puerto comercial de Odesa, en el mar Negro, convirtiéndose en el primer buque cargado con alimentos que sale de este enclave desde el inicio de la invasión rusa sobre Ucrania.
El desbloqueo del grano se ha producido como consecuencia del acuerdo alcanzado en el mes de julio entre Rusia y Ucrania en Estambul, donde se firmó la creación de un corredor en el mar Negro a través del cual se transportaría el grano con el fin de que los mercados globales puedan seguir comercializándolo. Hasta este momento y desde hace cinco meses, esta parte del mar estaba vigilada por fragatas rusas que no permitían el paso de ningún barco que pudiera transportar este bien, situación que ha generado una crisis alimentaria que ha repercutido en los precios de los alimentos.
En el pacto se establecía que los barcos ucranianos podrían volver a partir del puerto de Odesa, bajo la protección de las fragatas turcas, para poder desbloquear el cereal y posibilitar las exportaciones. Según ha confirmado el Ministerio de Infraestructuras de Ucrania, este primer barco habría salido a las seis de la mañana con dirección al puerto de Trípoli, en el Líbano.
En la aprobación de esta primera exportación, Turquía ha jugado un papel clave como mediador. Durante la firma, en la que los representantes de Ucrania y Rusia no se encontraron, el ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, selló primero el acuerdo con el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú para después efectuar la firma con el ministro de Defensa ucraniano, Oleksandr Kubrakov.
Según se llegó a pactar en el acuerdo, Rusia se comprometía a no atacar a los barcos ucranianos siempre que estos no fuesen empleados para la militarización de Ucrania o para otros fines bélicos. Además, se estipuló que, con el fin de hacer que esta condición se cumpla, Turquía organizaría un centro de coordinación desde el cual se velaría que los barcos que partan desde Odesa solamente estuviesen cargando productos que no se considerasen como bélicos. Junto a Turquía, la ONU también se encargará de vigilar que los barcos puedan navegar con total seguridad y que lo estipulado en el acuerdo se cumpla sin problemas.
Asimismo, el documento estipula una fecha de caducidad del propio acuerdo. Tanto Rusia como Ucrania podrán salirse del mismo pasados 120 días, fecha en la que tanto Moscú como Kiev decidirán seguir o no adelante con el acuerdo.
Por otro lado, las minas que se encuentran en las inmediaciones de las costas ucranianas seguirán estando operativas en la misma ubicación, pero se ha acordado que en un futuro se podría llevar a cabo el desminado, dependiendo del transcurso de los acontecimientos y de la prolongación del propio conflicto.
Algunos analistas consideran que este primer acuerdo supone un importante alto el fuego que, además, podría simbolizar un acercamiento entre las dos partes. Sin embargo, Ucrania ha querido aclarar que este pacto “no es un acuerdo con Rusia”, ya que tal y como declaró el asesor del presidente ucraniano, Mijailo Podoliak, “Ucrania no firma ningún acuerdo con Rusia”. Por otro lado, y de acuerdo con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, este acuerdo beneficia a ambos países ya que se encontrarían “al borde de la bancarrota” y evitará que la población siga sufriendo la escasez alimentaria.
Para el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, este desbloqueo impedirá que “millones de personas pasen hambre” y supondrá un “aire fresco para muchos países”. Asimismo, Erdogan, al igual que países como Francia y Reino Unido, siguen apostando por la diplomacia y se muestran convencidos de que la mesa de negociación será el único lugar donde se consiga alcanzar la paz.
